Sobre este modelo hay muchos artículos publicados que plantean preparaciones para conseguir que se competitivo, hay algunos muy interesantes sea dicho de paso, sin embargo muchos de ellos citan numerosas piezas de alta competición que, también sea dicho de paso, encarece la preparación para un modelo que en nuestro caso sólo queremos hacer correr en un circuito casero. Lo que os proponemos es que de forma muy sencilla, económica y eficaz paliar las carencias que este modelo demuestra en pista.
Nos parece un modelo muy bonito y que nos da pena que quede en la caja por aburrimiento en colocarlo una y otra vez dentro del carril así que tomamos el modelo y lo observamos:
en primer lugar detectamos que el paso de rueda del tren posterior es poco ancho para albergar la llanta y neumático, por lo que comprobamos que el neumático roza con la carrocería provocando, posiblemente, un mal comportamiento en el vehículo: rebotes. Solución: tomamos una lima de uñas o papel de lija y pasamos a ensanchar el paso de rueda posterior hasta comprobar que las ruedas giran libremente sin rozar la carrocería.
El coche donde demuestra peor comportamiento es en las curvas, donde se atraganta y opta por hacerlas en recto. Solución: Las ruedas delanteras tocan demasiado en pista y fuerzan al vehículo a seguir recto. Optamos por probar montarle unas llantas que tenemos de un Audi R8 Lighting del mismo fabricante NNCO que son mucho más pequeñas de diámetro. Acabamos el trabajo calzando a estas llantas unos neumáticos lo más desgastados y viejos que tengamos en el maletín.
Finalmente, notamos al oído que el coche al pasar por las vías suelta un clak-clak constante. Solución: la guía que lleva montada de serie es demasiado profunda para nuestra pista SCX antígua, por lo que u optamos por rebajarla o, lo que hacemos, es cambiársela por una Exin de un coche viejo que tenemos arrinconado en la caja de desguaces. Recordamos que las guías Exin son, de momento, las únicas compatibles entre estos dos fabricantes: Ninco y Scalextric.
Con todos estos cambios, ponemos el coche en pista y ... tachán!!!! el coche ya se comporta noblemente, haciendo nuestras delicias de poder comprobar que los pequeños cambios también son poderosos!
Para finalizar, consideramos que al motor le falta un pelín de potencia, quizá cambiando la relación podríamos paliar esta carencia a nuestro gusto, pero esto es harina de otro costal.
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